Las garras de los gatos cumplen un papel fundamental en la anatomía y actividades de la mascota, ya que son indispensables para su capacidad de cazar, trepar y defenderse de depredadores.

Las garras de los gatos son una herramienta indispensable en la vida de los felinos, ya que estás las usan para actividades diferentes como cazar presas, defenderse de depredadores, trepar y saltar, así como marcar su territorio.

Las garras de los gatos tienen una serie de características que las diferencian del resto de las de los otros animales. 

Aquí te dejamos 3 datos importantes sobre las garras de los gatos:

Son retráctiles: a diferencia de las garras de los perros y otros animales, las garras de los gatos se pueden retraer dentro de la piel de sus patas cuando no las están usando, lo que permite que se mantengan afiladas y protegidas. 

Tienen diferentes formas y tamaños: según la especie y la función que desempeñen, las garras de los gatos pueden tener forma curva o recta, así como ser largas o cortas, por ejemplo, algunos gatos salvajes tienen garras grandes y afiladas para cazar presas más grandes.

Están formadas por queratina: su estructura está conformada por queratina, la misma proteína fibrosa que está presente en las uñas y el cabello de los humanos.

Si bien, las garras de los gatos es una parte esencial de su anatomía y no deben de quitarlas por completo, es importante que se mantenga una constante revisión de las mismas, así como se cuida su alimentación y actividad física.